Por más de 1000 años el hombre ha inventado y disfrutado de una variedad de juegos consistentes en golpear una pelota, ya sea con el puño cerrado o con algún tipo de bate o raqueta.
Alrededor del año 1148 los franceses jugaban «le Paume» (la palma de la mano), que luego daría origen al Jeu de Paume, Tenis Real o, si usted practica el deporte, simplemente Tenis. A principios del siglo XIX esta obseción con las raquetas y pelotas dio origen a una nueva variedad del deporte en un lugar poco usual: la Prisión Fleet de Londres.
Los prisioneros de «la Fleet», en su mayoría deudores, se ejercitaban golpeando una pelota con una raqueta contra alguna de las muchas paredes, empezando así el juego de «Rackets». En 1820 el Raquets, por algún extraño camino, llegó hasta Harrow y otras escuelas inglesas y fue de esta fuente que nació nuestro deporte, el Squash.
El Squash fue creado alrededor del año 1830 en la Escuela Harrow, cuando sus alumnos descubrieron una pelota pinchada de Rackets, al aplastarse contra la pared con gran impacto, producía un juego con mayor variedad de golpes y requería un mayor esfurzo físico por parte de los jugadores, quienes simplemente no podían esperar que la pelota volviera rebotando a ellos, como es el caso del Rackets. Esta variante tuvo una aprobación masiva y en el año 1864, mientras que el Squash fue oficialmente declarado como deporte, se construyeron las primeras cuatro canchas de Squash.
Como cualquier otro deporte, el Squash en sus inicios no contaba con ningún tipo de estandarización internacional y era inevitable que sufriera leves variaciones en su forma de juego e indumentaria utilizada. Afortunadamente, sólo se crearon dos caminos en el deporte: uno en Inglaterra, con sus canchas de 21 pies de ancho y pelotas «blandas» y otro en América del Norte con sus canchas de 18,5 pies de ancho y pelotas «duras» y ya que ambas canchas tenían el mismo largo de 32 pies, la universalidad del Squash no se vio en peligro. Observaremos por separado estas dos ramas y también la forma en que el Squash llegó a casi todos los países del mundo.
SUS INICIOS EN INGLATERRA
El primer registro referido al Squash, además de aquel del Colegio Harrow, aparece en el libro inglés «La biblioteca del Badminton de Deportes y Pasatiempos», escrito por el Duque de Beaufort en 1890. Eustace Miles, campeón mundial de Tenis y Rackets, escribió el primer libro de Squash en el año 1901, expresando en el mismo que el deporte era disfrutado por miles de jugadores en varias partes del mundo. Para ese entonces ya existían canchas en colegios y universidades en Inglaterra y en algunos domicilios particulares. El primer Campeonato Mundial de Squash Profesional se llevó a cabo en Inglaterra en 1920, ganándole C.R. Read (Club Queens) a W.B. Johnson (Club RAC).
En 1923 cuando H.A.L. Rudd escribió para la «Revista de Baily», previó que el Rackets perdería muchos jugadores por el Squash, con la llegada del primer Campeonato Inglés para Amateurs, según su opinión, el Squash implicaba transpirar pero no exigía las mismas habilidades del Rackets. La previsión de Rudd fue correcta: El Squash creció rápidamente, dejando atrás a su deporte fundador.
La estructura administrativa del Squash se desarrolló junto con su juego. Las primeras asociaciones nacionales en crearse fueron la Asociación Estadounidense de Squash Rackets en 1907 y la Asociación Canadiense de Squash Rackets en 1911. En Inglaterra el deporte era reglamentado por una subcomisión de la Asociación de Tennis y Rackets, desde 1908, hasta convertirse en la Asociación de Squash Rackets en 1928.
Se eligió como modelo de medida estandar, una cancha construída en el BATH CLUB de Londres a comienzos del siglo 20, con 32 pies por 21 pies o 9,75 metros por 6,4 metros, mucho más chica que la cancha de Rackets que mide 60 pies por 30 pies (18,3 metros por 9,1 metros). Las dimensiones británicas se propusieron en 1911, pero se ratificaron recién en 1923.
Se utilizó de manera universal el sistema de puntaje «point a rally» a 15 hasta que en 1926 se introdujo en América del Norte el sistema actual «hand in – hand out» a 9 puntos. De todos modos, el juego americano con pelota dura se continuó jugando a 15 puntos y se adoptó este sistema para el circuito profesional masculino de 1991 a fin de acortar los partidos.
Traducción de la nota «130 years of world squash» escrita por Ted Wallbutton